sábado, 14 de marzo de 2009

Táctica del chavismo es mantener “silencio” para favorecer al FMLN

Silencio y prudencia. Esa es la estrategia asumida por el gobierno de Hugo Chávez y el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), a la espera de los resultados de las elecciones presidenciales en El Salvador.
La expectativa ante un triunfo del FMLN ha levantado entusiasmo en los pasillos del poder venezolano. La eventual llegada al poder de Mauricio Funes completaría un “corredor de izquierdas” en Centroamérica, junto con Daniel Ortega, en Nicaragua; Álvaro Colom, en Guatemala; y Manuel Zelaya, en Honduras; y un nuevo socio en alguno de los mecanismos de integración regional de la doctrina “antiimperialista” que se impulsan desde Caracas, como la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA).
Chávez, sin embargo, ha sido esta vez mucho menos beligerante, descartando apoyar abiertamente la candidatura de Funes como ha hecho en otras ocasiones con, por ejemplo, Rafael Correa, en Ecuador, y Evo Morales, en Bolivia.
Sospechoso
Fuentes vinculadas a la dirección nacional del PSUV confirman que esto no es casual: saben que intervenir directamente en la campaña electoral salvadoreña puede ser contraproducente, polarizaría al país, le daría armas a los adversarios del FMLN y repetiría el efecto registrado durante los comicios presidenciales de Perú en 2006, cuando Chávez decidió apadrinar directamente a Ollanta Humala.
“Es una gran noticia para la izquierda latinoamericana que el FMLN finalmente llegue al poder en El Salvador, después de tantos años de lucha. Pero es un juego político delicado, y es mejor evitar cualquier intervención que perturbe la campaña de los compañeros salvadoreños”, reveló la semana pasada uno de los miembros de la dirección nacional del PSUV en Caracas, quien prefirió el anonimato para respetar la estrategia presidencial.
La última vez que Chávez habló públicamente sobre El Salvador y el FMLN fue hace más de un año, el 9 de febrero de 2008, cuando rechazó el contenido de un informe de inteligencia divulgado por la Casa Blanca: “Me acusan de cualquier cosa. Yo ya me río. Ahora es un informe de inteligencia gringo diciendo que Chávez va a financiar la campaña del Farabundo Martí, porque parece que va ganando. Pues eso es mentira. Ni nos hace falta, ni a ellos les hace falta tampoco, porque el FMLN es uno de los partidos históricos más antiguos y mejor organizados de este continente”.
En medio de la estrategia de silencio, el PSUV y el gobierno de Chávez descartaron enviar dirigentes de alto nivel a El Salvador para observar los comicios.
El único venezolano que asiste como testigo del proceso es Luis Díaz Laplace: un diputado al Parlamento Latinoamericano y dirigente de bajo rango del PSUV, quien esta misma semana confirmó el voto de silencio venezolano sobre estas elecciones.
“En los medios de comunicación salvadoreños se criminaliza la imagen del presidente Chávez, y quieren deteriorar la amistad que tiene el presidente y el pueblo venezolano con el pueblo salvadoreño y los líderes del FMLN. Pero nosotros hemos sido respetuosos con el derecho que tienen los pueblos a decidir su destino. Creemos en la autodeterminación de los pueblos, es algo que cumplimos al pie de la letra”, sostuvo Díaz Laplace en una entrevista telefónica con la emisora estatal Venezolana de Televisión.
Aunque desde el PSUV nadie pone en duda la alianza ideológica y política con el FMLN, en el seno del chavismo venezolano han surgido dudas con respecto a algunas posiciones del candidato de la izquierda salvadoreña, quien en los últimos meses ha querido retratarse con Lula Da Silva y Michelle Bachelet. “Mauricio Funes ha dicho, por ejemplo, que no está en su programa inscribir a El Salvador en el ALBA, y que mantendrá los acuerdos comerciales firmados con Estados Unidos. Esas posiciones son incompatibles con la posición histórica del FMLN”, explica una fuente de la dirección del PSUV, quien revela que no esperarán mucho tiempo para poner a prueba la fidelidad política de Funes. “Si gana, habrá que ver cómo se comporta. Quizás sea un ‘tibio’, como el presidente de Guatemala (Álvaro Colom, quien no se unió al ALBA, pero sí a Petrocaribe). Sin embargo, del FMLN esperamos un mayor compromiso político con el proceso revolucionario latinoamericano”.

Destacan el desarrollo económico de El Salvador

The Cato Institute, uno de los principales tanques de pensamiento de Washington, asegura en un informe que el país es un ejemplo para el resto de la región, por el éxito en la implementación de reformas económicas.
Los resultados de las reformas económicas implementadas en El Salvador convierten al país en un ejemplo de desarrollo económico en Centroamérica, aseguró Juan Carlos Hidalgo, coordinador de proyectos para América Latina en el Cato Institute, uno de los principales generadores de pensamiento de Washington, EUA.
Hidalgo publicó recientemente un estudio titulado “El Salvador: ¿tigrito centroamericano?”, en el que detalla el proceso de implementación de reformas impulsado en el país desde el fin del conflicto armado en 1992.
El reporte destaca la privatización de empresas estatales, la apertura comercial y financiera, la privatización del sistema de pensiones y la adopción del dólar como moneda oficial. “Dichas reformas colocan a El Salvador dentro de las 25 economías más libres del planeta de acuerdo al Informe sobre la Libertad Económica en el Mundo del Fraser Institute de Canadá”, indica Hidalgo.
El analista asegura que las políticas de libre mercado aplicadas en El Salvador han tenido un impacto positivo en el campo social: entre 1991 y 2007, el porcentaje de hogares por debajo de la línea de pobreza cayó del 60% al 34.6%. “De igual manera otros indicadores como la matrícula escolar, la mortalidad infantil y la cantidad de hogares sin acceso a agua potable han experimentado mejoras substanciales”, detalla. 
Bajo crecimiento
Hidalgo se pregunta entonces, ¿por qué el país no refleja los resultados de estas reformas en una mayor tasa de crecimiento económico? La respuesta, según el autor, podría ser un mal cálculo de los indicadores nacionales.
De hecho, el Ministerio de Economía y el Banco Central de Reserva han anunciado el inicio de un proceso de modernización de las cuentas nacionales que permitirá realizar un cálculo más preciso de indicadores como el producto interno bruto (PIB) y el índice de precios al consumidor (IPC). Ambos indicadores se calculan con bases en precios y productos de hace más de 20 años.
Según Hidalgo, las cuentas nacionales parecen subestimar significativamente el rendimiento de la economía debido a mediciones deficientes, las cuales subvalúan el sector de servicios, área en que El Salvador es un líder en América Central. “Es probablemente que la economía salvadoreña sea un 30% más grande que lo indicado por las cifras oficiales... La tasa promedio de crecimiento económico per cápita desde 1992 ha sido de aproximadamente 5.2% al año.”
En este punto, el informe cita a Manuel Enrique Hinds, ex ministro de Economía, que asegura que la realidad del país ha cambiado. “El problema es que si la economía está cambiando su composición, este método (el actual) tiende a subestimar la producción actual”, sostiene Hinds.
Pero, además de las reformas económicas, Hidalgo destaca otros factores que se vinculan con la mejora en la economía del país, como la firma de los Acuerdos de Paz y la significativa recepción de remesas familiares, que durante 2008 fueron el equivalente a poco más del 18% del PIB del país.

viernes, 13 de marzo de 2009

La verdad nos hace libres

En mi artículo publicado en LA PRENSA GRÁFICA el 1.º de agosto de 2006 titulado “La chusmocracia del Frente”, evidenciaba los planes desestabilizadores que preparaban los comunistas criollos, para el proceso electoral del año 2009, que consistirían en huelgas, tomas de calle, manifestaciones, ataques a los medios de comunicación, aumento delincuencial, incendio de autobuses.

Allí mismo manifestaba que para todas estas acciones realizarían alianzas con bandas de mareros, con sus grupos armados o de choque, como la MSO y la Brigada Limón, dirigida por el miliciano de cachucha, y otros grupos que tenían en diferentes lugares, donde los entrenan en prácticas terroristas, ubicados en Guazapa, al sur de San Vicente, Usulután.

Igualmente en esa oportunidad manifestaba que estaban bajo la dirección de un militar chavista, conocido con el sobrenombre de “el Negro” quien además entrenaba a grupos de mareros, para atacar estaciones de la Policía Nacional Civil.

Muchas de aquellas afirmaciones que establecía en el artículo referido, sin ser Nostradamus, se han cumplido casi en su totalidad, y recientemente la inteligencia policial descubrió un plan para atacar la PNC de San Jacinto.

Siempre que afirmo algo, o establezco un juicio o demanda en cualquiera institución gubernamental, lo hago basado en la verdad y debidamente documentado y he sido paciente para esperar que resplandezca esa verdad y se aplique la justicia. El caso más reciente que denuncié en la Corte de Cuentas es la corrupción en el manejo de los fondos municipales de las alcaldías del FMLN, que conforman ENEPASA.

A los 14 meses de mi denuncia, se ha comprobado la verdad; como también transcurrieron 14 meses para obtener dos resoluciones favorables de las demandas de inconstitucionalidad, interpuestas por violaciones de alcaldes del FMLN, a nuestra Constitución, y 14 años en el caso del Boquerón. Tanto 14 me recuerda la máquina 14 del ferrocarril de la Salvador Railway Co., una máquina fuerte que a pesar de los obstáculos siempre llegaba a su destino.

Ahora estamos los salvadoreños frente al proceso electoral 2009, y no debemos permitir que los comunistas criollos lleguen a gobernar nuestro El Salvador, porque sería como entregárselo a los inquilinos de Zacatraz y estaríamos validando los secuestros, los asesinatos, la destrucción de nuestra infraestructura y otras graves violaciones a la ley penal; al mismo tiempo estaríamos dando el visto bueno a la injerencia abusiva de Chávez, y las FARC, que lesionan nuestra soberanía nacional.

Los salvadoreños tenemos hoy en nuestras manos la libertad de El Salvador, principio que Dios fundió con fuego en el ser humano y por el cual se ha luchado constantemente desde el inicio de la creación.

En nuestro El Salvador, se ha luchado por este principio desde la época precolombina y esta lucha se acrecentó en el proceso de independencia, en el cual se realizaron acciones heroicas, que deben servirnos de ejemplo.

Desde 1926, nuestra libertad se ha visto amenazada en varias ocasiones por los comunistas criollos, pero fue la Fuerza Armada quien ejerció el derecho de legítima defensa de la patria; porque para el soldado la libertad es un dogma y jamás debe consentir en nuestra Patria un régimen comunista. Los empresarios, y los agricultores tampoco pueden permitir un régimen comunista, pues estos pretenden democratizar la propiedad.

Salvadoreños: llegó el momento de decirle a los comunistas criollos que no merecen ni siquiera vivir en este país, y a Chávez y las FARC, que en El Salvador hay hombres y mujeres valientes, dispuestos a defender nuestra soberanía y libertad, aun a costa de sus vidas, como lo dice el verso de nuestro Himno Nacional: “Con su sangre escribió libertad”. ¡Viva El Salvador!

jueves, 12 de marzo de 2009

Final de campaña

Faltan pocas horas para el día de las votaciones. Ya no hay mensajes publicitarios en los medios. Atrás quedaron aquellas encuestas que proyectaban una "aplastante e irreversible victoria" del FMLN en las dos elecciones de este año. Atrás quedó el triunfalismo en esas filas. Los resultados del domingo 18 de enero, cambiaron de manera brusca el escenario electoral de cara a las elecciones presidenciales.
Muy a pesar de los esfuerzos que hizo Mauricio Funes para salvar del naufragio a Violeta Menjívar, Norman Quijano se alzó con la victoria en San Salvador. Resultó que no era cierto lo de la imbatibilidad del candidato rojo. Luego de ese día pasó que el partido ARENA, que venía de sufrir un muy difícil proceso interno, se unificó. Y luego pasó algo inédito en la historia del país: tres de los partidos participantes en el proceso, se aliaron con el partido en el poder, para derrotar al FMLN.
Lo usual es que los partidos de oposición se unan para luchar contra el partido oficial, sobre todo si éste lleva varios años en el poder. Pero acá fue al revés. El asunto no deja de sorprender. Cuando todo comenzó, la candidatura de Rodrigo Ávila parecía condenada a la soledad. Ni siquiera se veía capaz de unificar a su propio partido. Pero esa candidatura cierra campaña no sólo aglutinando a ARENA, sino a todas las fuerzas democráticas del país, incluso a importantes sectores de la izquierda no radical.
Por el contrario, la candidatura de Mauricio Funes que inició con certezas y prematuras arrogancias de ganador indiscutible, cerró en medio de tensiones con su propio partido, con importantes empresarios y periodistas. En los últimos días de campaña a Funes se le vio ante la prensa, permanentemente aclarando cosas y proponiendo nada. Lo de acusar a Rodrigo Ávila de cosas graves en base a una entrevista fabricada fue también un grave error. Todo lo que Funes diga después de esa falsa acusación, tiene muy poca credibilidad.
Pasada la campaña el candidato Funes y su partido tendrán que aclarar también de dónde ha salido el dinero para financiar la más onerosa campaña publicitaria en la historia del país. Tan onerosa, que no sólo ha superado al partido ARENA en materia de inversión publicitaria, sino también para cambiar el estilo de vida del candidato presidencial de acuerdo a las noticias.
Cierre de campaña sorprendente. Casi a la inversa con lo que ocurría hace meses. Sin embargo a pesar de la notoria recuperación de ARENA, nada está escrito todavía. Todo parece indicar que los resultados serán muy apretados. Las votaciones serán hasta el domingo. Hay todavía algunas horas para meditar con tranquilidad. Insisto que al final la elección trasciende a los partidos políticos. Al final se trata de una consulta sobre el sistema político.
El FMLN, más allá de lo que digan los anuncios publicitarios de su candidato y articulistas como Roberto Turcios, tiene la firme convicción de llevar a nuestro país por los sinuosos y sombríos caminos del socialismo del Siglo XXI, bajo la batuta de Hugo Chávez. Nunca los comandantes lo negaron, nunca Mauricio Funes, a lo largo de su campaña tuvo claridad en rechazar de manera categórica al tipo de regímenes como los de Cuba y Venezuela.
Roberto Turcios, en su última columna, sigue alegando que hay una campaña de miedo y sugiere que el FMLN no tiene ningún deseo de llevar al país por la misma ruta donde ya marchan Ecuador, Bolivia y Nicaragua. Para respaldar semejante alegato hace una desafortunada comparación entre esta campaña y la de 1972. Tiempos distintos, protagonistas distintos, Roberto.
En 1972, los comunistas en la Unión Nacional Opositora, eran una minoría. En el FMLN son todo. Ni Mauricio Funes es Napoleón Duarte (las diferencias son de todo tipo: oratoria, preparación académica, trayectoria, vida privada, etc.). Y menos Salvador Sánchez Cerén es Guillermo Manuel Ungo (acá las diferencias son todavía más dramáticas).
La Unión Nacional Opositora rechazaba a los gobiernos militares totalitarios, mientras que el FMLN es aliado de un gobierno militar dictatorial, encabezado por un verdadero gorila. No hay simulación en las declaraciones de José Luís Merino, ni en las aspiraciones históricas de las fuerzas que quedaron en poder de lo que fue el FMLN.
Que me disculpe Roberto Turcios y los tres o cuatro articulistas que piensan como él, pero no hay nada, absolutamente nada, que indique que el FMLN ha renunciado a su sueño socialista revolucionario (hoy por hoy encarnado en el modelo político venezolano). Sobre eso queridos lectores es la elección del domingo.

Peligran remesas y TPS si el FMLN gana

Leyes antiterroristas de Estados Unidos obligarían al Congreso a exigir duras medidas contra un Estado con vínculos terroristas
Una victoria del FMLN en las elecciones presidenciales del 15 de marzo obligaría al gobierno de Barack Obama a hacer una revisión total de la relación de los Estados Unidos con El Salvador, y podría requerir el "cese de los privilegios del TPS" para los salvadoreños y un "estricto control de las remesas", argumentaron ayer Dana Rohrabacher y Connie Mack, congresistas de los estados de California y de Florida, respectivamente.
"Si el FMLN llegase a ganar este domingo, El Salvador se convertiría rápidamente en un satélite y en un procurador de Venezuela, Rusia y quizás Irán", advirtió Mack durante la sesión del congreso, y agregó: "Necesitamos sopesar las potenciales ramificaciones de tal elección y su impacto en nuestras relaciones (con El Salvador), sobre todo en cuanto a las amplias y extendidas políticas sobre el TPS y sobre el flujo de remesas".
Rohrabacher insistió en que El Salvador ha sido un importante aliado de los Estados Unidos en el combate al narcotráfico y en la guerra de Irak, y de que, por lo tanto, los privilegios de legalización temporal para los inmigrantes salvadoreños ilegales han sido una merecida concesión a "un amigo". ¿Por qué, entonces, exigiría condiciones y restricciones para El Salvador si llegase a gobernar el FMLN?
"Mi propósito", aclaró Rohrabacher, "no es castigar a los salvadoreños, pero si un gobierno pro-terrorista toma el poder, será imperativo que revisemos nuestras políticas con el fin de proteger la seguridad nacional de los Estados Unidos".
Tanto Rohrabacher como Mack son miembros del subcomité de asuntos hemisféricos, y tienen influencia y poder de decisión en la formulación y la legislación de la política exterior estadounidense en relación con temas de seguridad nacional.
Dado que El Salvador recibe cantidades multimillonarias de ayuda económica y técnica, así como consideraciones especiales como el TPS, es parte del trabajo legislativo de Rohrabacher y Mack revisar la política hacia El Salvador si ocurriera un cambio substancial o "radical" de gobierno.
El fin al TPS y a las Remesas
Si Mauricio Funes gana la elección del 15 de marzo Rohrabacher propone dos cambios a la política exterior hacia El Salvador: la terminación definitiva del TPS y el estricto control de las remesas.
"Si el FMLN asume el gobierno de El Salvador, será necesario que las autoridades de los Estados Unidos consideren los vínculos del FMLN con grupos violentos antiamericanos y con grupos identificados como terroristas y, sobre esa base, proceder a la terminación inmediata del TPS para El Salvador", indicó Rohrabacher.
En segundo lugar, indicó, un "gobierno del FMLN podría requerir el estricto control de las remesas".
"Dada la naturaleza pro-terrorista del FMLN, y sus vínculos con grupos terroristas", expuso Rohrabacher, "si el FMLN ocupa el gobierno en El Salvador, será urgente aplicar controles especiales al flujo de remesas de los Estados Unidos a El Salvador, que alcanza los cuatro mil millones de dólares por año".
Dado que las leyes anti-terroristas de los Estados Unidos se han endurecido desde el ataque a Nueva York y a Washington ocurrido el 11 de septiembre de 2001, si hay pruebas de que un gobierno constituye una amenaza a los intereses de seguridad de los Estados Unidos, Obama podría verse obligado a aplicar fuertes restricciones y controles a todas las fuentes de financiamiento hacia El Salvador.
"Este comité", afirmó Rohrabacher, "tendrá que examinar y considerar la terminación del flujo de las remesas a El Salvador, tanto de nuestro país, en nuestra moneda, o utilizando nuestro sistema financiero y nuestros medios de telecomunicaciones vía terrestre o satelital".
Este control, explicó el congresista, lo ejercerá el Departamento del Tesoro (Hacienda); en cuanto al TPS, el Departamento de Seguridad Nacional, "tendrá que llevar a cabo una revisión masiva de los salvadoreños que residen o entran ilegalmente a los Estados Unidos".
Rohrabacher y Mack sostuvieron que estas medidas serán necesarias porque "el FMLN sería un contraparte poco fiable".

Dos preocupaciones serias

Esta pudiera ser la última columna que escribo con absoluta libertad y sin temores de represalias, como lo he venido haciendo los últimos 12 años y medio. De ganar el FMLN, observando las actuaciones del candidato Funes —quien demuestra un alto grado de intolerancia y ninguna disposición a aceptar la crítica— a mí, como a la mayoría de columnistas y generadores de opinión, nos invade el temor de que esta bella época de libertad de expresión irrestricta se termine.
Me pregunto cómo reaccionaría el señor Funes siendo presidente a una columna en que lo critiqué abiertamente. ¿Lo tomaría serenamente, respetando la opinión del ciudadano, evaluando si hay algo válido en ella, o se enfadará?, como se le observa constantemente ante preguntas de la prensa. Y si el presidente se enfada, ¿puedo esperar represalias?
Es de reconocer que el presidente actual ha respetado la libertad de expresión irrestrictamente. A las críticas más directas y duras que le he hecho desde la columna semanal que escribo, o desde entrevistas de TV o radiales, nunca recibí una mala señal, más bien, algunas veces recibí llamadas telefónicas de él para conversar sobre el tema y alentándome a seguir expresado mis ideas. 
Con ocasión de uno de los temas más delicados —las primarias que dividieron a la derecha— escribí cosas que molestaron a gente de su grupo cercano. Casualmente coincidimos en un evento público, tuvimos oportunidad de conversar con él, y como siempre me animó a seguir expresando mis ideas. Presidente, le dije, entiendo que usted se molestó mucho con una columna que escribí... “No —me dijo—, se enojaron algunos de mis colaboradores, yo le agradeceré que siga escribiendo con libertad y diga lo que ve desde fuera. Con frecuencia la gente a mi alrededor me dice solo lo que creen que yo quiero oír, me es de mucha utilidad, sígalo haciendo.” ¿Tendríamos ese espíritu con el señor Funes?
Otro tema que preocupa mucho es el discurso anticipado de fraude que hace el candidato y los principales dirigentes del FMLN, haciendo acusaciones anticipadas sobre publicidad, medios cargados a la derecha, llegada de extranjeros y fábrica de DUI. Hay un magistrado del FMLN en el Tribunal Supremo Electoral.
La preocupación es que esos señalamientos presagian violencia. “Si gano el proceso es limpio, si pierdo es que hubo fraude.” Eso no se vale. 
Ese es el comportamiento de las izquierdas latinoamericanas: López Obrador en México, Otón Solís en Costa Rica, en que ganó Arias por 16,000 votos, y hasta que contaron manualmente todos los votos la sociedad costarricense, menos violenta, soportó. Antes fue en Bolivia.
¿Se prepara una violencia electoral en caso de perder el Frente? Eso no abona a la democracia y a la gobernabilidad. Quisiéramos creer que eso no es cierto, que el discurso derrotista y amenazante de Funes sea únicamente un estado de ánimo y no un acto preparado para desatar violencia y deslegitimar la elección si pierden. Todas las señales indican que si ARENA pierde, no intenta desligitimar la elección y provocar violencia.

viernes, 6 de marzo de 2009

“Si hay comandantes como ministros, no habrán inversionistas”: Kriete

Las futuras inversiones que la aerolínea Transportes Aéreos del Continente Americano (TACA) podría hacer en El Salvador serán suspendidas si se diera un eventual triunfo de la izquierda en las elecciones presidenciales del próximo 15 de marzo, aunque la empresa continuará operando aquí, comentó ayer el presidente de la compañía, Roberto Kriete, tras firmar un acuerdo de entendimiento con el Ministerio de Turismo para traer más turistas al país.
“TACA va a seguir en el país, porque no tenemos ningún interés ni intención de irnos a ningún lado; si vamos a invertir o no vamos a invertir depende de la actitud y de la gente que esté en las posiciones de poder en el Frente, y de la actitud que ellos demuestren hacia TACA y hacia el sector privado en términos generales. Estemos claro que los inversionistas son muy temerosos de los cambio políticos, lo que quieren ver es estabilidad, legalidad, institucionalidad, que se le respeten sus acuerdos y el marco regulatorio y legal”, aseguró.
Adicionalmente, dijo que “en la medida que cualquier gobierno anuncie, proponga, insinúe o que la gente perciba que va a sacudir el sistema, en esa medida la gente no invierte”, sentenció.
El ejecutivo añadió que cada cinco años, antes de las elecciones y por seis meses, la construcción de viviendas y edificios se paraliza; la gente no invierte porque quiere ver primero quién va a ganar y qué les van a ofrecer a los inversionistas en cuanto a estabilidad económica y jurídica, cuestionó.
Kriete afirmó que uno de los problemas del FMLN es que no tiene credibilidad porque tradicionalmente ha sido antisistema, y porque quieren establecer el socialismo del Siglo XXI, “muy similar a lo que ha hecho Chávez, Evo Morales y compañía, y eso a los empresarios, obviamente no les gusta, porque crea inestabilidad y las consecuencias de eso son una falta de inversión y desarrollo”.
El empresario detalló que si se da el caso de que llegara Mauricio Funes al gobierno, y demostrara que él pone los ministros y que son gente con capacidad de desempeñar el cargo, que tienen el conocimiento, la honestidad, la dedicación y la filosofía adecuada para atraer inversión, “creo que los inversionistas lo verán con buenos ojos y responderán invirtiendo en el país”.
“Si lo contrario se da y terminamos con comandantes ministros, que no tienen el conocimiento adecuado, la preparación técnica y académica, siguiendo políticas equivocadas, que no le den la paz y la tranquilidad a los inversionistas, pues los inversionistas no invertirán, eso es así de claro como lo veo yo, no hay a donde perderse”, añadió.
Kriete parafraseó el libro “Cuentos Chinos”, afirmando que aquellos países que atraen inversión tratan bien al sector privado y tienen reglas claras y las respetan, logran desarrollo económico y van saliendo de la pobreza, sean socialistas, derechistas o como quieran llamarse.
Criticó a aquellos países que, siendo de derecha o de izquierda, no respetan las reglas del juego, cambian las regulaciones a cada rato, antagonizan al sector privado y no atraen inversión, son países que no se desarrollan y no salen de la pobreza.
No está de acuerdo con los que piensan que hay que acabarse a los ricos, sino “a los pobres. Yo quiero un país de ricos, que dentro de 30 años todos los hijos de los salvadoreños que están vivos hoy, tengan un grado universitario y sean profesionales y que tengan carro, televisión, un trabajo profesional digno y que puedan mandar a sus hijos a escuelas y colegios. Yo como salvadoreño eso es lo que quiero, porque si lo que queremos es acabarnos a los ricos, pues vamos a terminar con un país de pobres, sin ninguna esperanza”, concluyó.